Después de una intervención de prótesis de rodilla, el buen resultado de la misma va a depender, no sólo de la técnica quirúrgica empleada, sino de los cuidados postoperatorios y la rehabilitación de la rodilla. Además de seguir las indicaciones del cirujano ortopédico, es importante realizar una serie de ejercicios rehabilitadores que te ayudarán a recuperarte y a sacarle un mayor rendimiento a la prótesis. En este artículo te vamos a contar los ejercicios que se recomiendan realizar tras el reemplazo de rodilla.
¿EN QUÉ CONSISTE LA CIRUGÍA DE ARTROPLASTIA DE RODILLA?
La cirugía de artroplastia de rodilla consiste en sustituir el cartílago dañado junto al hueso degenerado de la articulación por una prótesis. La intervención consiste en realizar una incisión en la rodilla para cortar y extraer parcialmente el fémur, la tibia y el peroné, y sustituirlos por la prótesis.
El implante de una prótesis de rodilla está indicado cuando el grado de deterioro de la articulación y el dolor impiden al paciente caminar. La causa más común es la artrosis de rodilla o gonartrosis. Asimismo, ciertas fracturas en las que hay un gran daño del hueso subcondral y determinados tumores óseos articulares también podrían aconsejar el implante protésico.
Las principales ventajas de su uso son la disminución del dolor y el aumento de la movilidad articular. Por el contrario, los inconvenientes son el desgaste del material (su durabilidad es limitada) y las posibles secuelas o complicaciones que pueden surgir, tales como infecciones.
Antes de recurrir a la cirugía, se suele recomendar un tratamiento conservador basado en medidas terapéuticas como el tratamiento con antiinflamatorios, fisioterapia e infiltraciones en fases de dolor agudo. En Clínica Columbia somos especialistas en fisioterapia y rehabilitación traumatológica y ortopédica y podemos asesorarte.
Consejos y cuidados tras recibir el alta hospitalaria
Algunas de las principales recomendaciones tras la intervención quirúrgica son:
- Evita sentarte en sillas bajas.
- Cuando vayas a ponerte de pie con las muletas, apoya siempre la pierna sana. No dejes caer todo el peso sobre la pierna intervenida.
- No permanezcas demasiado tiempo sentado ni de pie.
- Para levantarte de la cama, acércate al borde y gira las caderas.
- Utiliza la ducha y no la bañera para lavarte. Es importante contar con puntos de apoyo a la hora de entrar y salir. Además, se recomienda hacerlo en una silla dentro de la ducha y una alfombrilla antideslizante para que sea más cómodo y seguro.
- No cruces las piernas ni te arrodilles.
- Utiliza zapatos cerrados que se agarren bien al pie y con suelas antideslizantes.
- No conduzcas ni realices actividades físicas intensas.
- Intenta mantener una dieta correcta y un peso corporal adecuado.
Estas pautas son necesarias tanto en la primera etapa de recuperación, antes de recibir el alta hospitalaria, como en etapas posteriores, continuando la recuperación desde casa.
¿CUÁNDO SE DEBE EMPEZAR CON LA REHABILITACIÓN?
La rehabilitación se ha de empezar tan pronto como el paciente se sienta capaz de moverse. La movilización precoz es fundamental para evitar la trombosis, por lo que es importante iniciar cuanto antes los ejercicios de rehabilitación.
Tanto los cirujanos como los propios fisioterapeutas recomendamos el apoyo de la pierna (bipedestación) a partir de las primeras 24 horas tras la cirugía. Pasadas las 48 horas ya se deberían realizar ejercicios simples como caminar despacio con muletas y subir y bajar escalones.
¿Cuánto dura la rehabilitación de prótesis de rodilla?
La rehabilitación de la prótesis de rodilla puede durar aproximadamente entre 3 y 4 meses.
Desde el primer día tras la operación, el fisioterapeuta movilizará la rodilla de forma pasiva-asistida. Poco a poco y día tras día, deberá aumentar el rango de movilidad de la articulación.
El fisioterapeuta tiene que volver a enseñar al paciente a caminar, ya que se deben corregir diferentes fases de la marcha. El buen manejo de las muletas evitará malas posturas y futuras lesiones. Es importante respetar los grados de la articulación (no forzar nunca).
Durante las primeras semanas, siempre se trabajará la marcha mediante muletas. Tras recomendación del fisioterapeuta o médico, se podrá retirar una de ellas y, posteriormente, la otra.
EJERCICIOS PARA LA REHABILITACIÓN DE PRÓTESIS DE RODILLA
Es fundamental realizar ejercicios de forma regular y gradual para restaurar la movilidad de la rodilla y la fuerza en toda la extremidad inferior. Con toda seguridad, al principio sentirás cierta incomodidad, que se irá transformando en instinto de superación. Estos ejercicios te ayudarán en la recuperación y disminuirán el dolor progresivamente.
El objetivo de la rehabilitación es trabajar la movilización de la rodilla, fortalecer el músculo y realizar una reprogramación neuromuscular para recuperar la amplitud articular.
Bombeo de tobillo
En decúbito supino y con la rodilla en extensión. Mueve el pie arriba y abajo rítmicamente contrayendo los músculos de la tibia y el peroné. El objetivo del ejercicio es realizar una flexo-extensión de tobillo que nos ayude a disminuir la inflamación de toda la extremidad inferior y facilite el retorno venoso en general.
Realiza este ejercicio en períodos de 2 a 3 minutos a lo largo del día.
Isométrico cuádriceps
En decúbito supino y con la rodilla en extensión. El objetivo es contraer el cuádriceps durante varios segundos. Aprieta el músculo del muslo e intenta enderezar la rodilla. Aguanta en esta posición unos 5/10 segundos.
Realiza este ejercicio aproximadamente 10 veces, relaja un minuto y repetimos.
Elevación de pierna recta
Con la rodilla totalmente extendida sobre la cama y apretando el muslo, levanta la pierna varios centímetros. Mantén la posición durante 5/10 segundos y baja la pierna lentamente, siempre manteniendo la tensión en la rodilla hasta el final del ejercicio.
También puedes realizarlo sentado.
Rodilla extendida
Pon una pequeña toalla enrollada arriba del talón o un cojín en forma de cilindro, de forma que el talón no toque la cama. Aprieta el muslo e intenta extender la rodilla y tocar el dorso de la misma con la cama. Mantén la rodilla totalmente extendida durante 5 o 10 segundos.
Flexión con apoyo de la cama
Intenta doblar la rodilla deslizando el talón por la cama. Mantén la posición y vuelve a estirar la rodilla. No tienes que intentar llegar a doblar por completo la rodilla la primera vez; cada repetición será un poquito más fácil que la anterior.
Repite el ejercicio en series de 10 repeticiones y descansa.
Flexión con apoyo sentado
Siéntate al borde de la cama o en una silla con el muslo apoyado y pon un pie detrás del talón de la rodilla operada para acompañar el movimiento. Lentamente dobla la rodilla tanto como puedas y mantenla en esta posición de 5 a 10 segundos.
Repítelo varias veces hasta que notes la pierna agotada o hasta que puedas doblar la rodilla completamente.
Flexión sin apoyo sentado
Partiendo de la misma posición, y una vez hayas conseguido llegar a apoyar el pie en el suelo, intenta empujarlo un poquito más con el otro, para aumentar la flexión de rodilla. Mantén de 5 a 10 segundos y extiende la rodilla.
Repite el ejercicio 10 veces.
Rehabilitación de prótesis de rodilla y bicicleta estática
Uno de los ejercicios más eficaces, efectivos y útiles en la rehabilitación es hacer uso de una bicicleta estática. Pedalear, ya sea tanto hacia adelante como hacia atrás, va a contribuir a que la rodilla se vuelva más fuerte y, sobre todo, a que recupere la capacidad de movimiento que tenía antes de pasar por el quirófano.
Tan pronto como se sientas seguro y tu fisioterapeuta te lo permita, podrás hacer algunos ejercicios en tu bicicleta estática en casa, al ser un deporte suave, seguro y práctico.
Asegúrate de bajar el sillín para evitar que la pierna se tense demasiado al pedalear. Comienza con sesiones de entrenamiento de 5 a 10 minutos y auméntalas gradualmente. Pedalea muy lento al principio con una resistencia baja o media que puedes ir incrementando paulatinamente con el tiempo.
Aumenta la duración de tus sesiones de entrenamiento, tu velocidad de pedaleo y el nivel de resistencia de tu bicicleta estática en función de tus sensaciones y de las recomendaciones de tu fisioterapeuta.
Es conveniente que todos estos ejercicios y pautas estén supervisados por un fisioterapeuta. Si has sido sometido a una intervención de prótesis de rodilla, en Clínica Columbia tenemos a los mejores profesionales expertos en rehabilitación y fisioterapia en Bilbao y Bizkaia, y estaremos encantados de atenderte en cualquiera de nuestros centros. ¡Ven y conócenos!